sábado, 30 de julio de 2011

MARIONETA




Gracioso, ¿verdad?


Lo triste es que estemos en manos de otra persona, nos dirija, sin gozar de libertad...


¿Y Es peor que lo sepamos o que no?

martes, 26 de julio de 2011

LA PEREZA DEL TIEMPO




"La edad, como las nubes,
es imprecisa y cambiante"

ISABEL ALLENDE

"El cuaderno de Maya"




LA PEREZA DEL TIEMPO


Tiembla en la pereza del tiempo,


regurgitando minutos y segundos.


Vive en la destreza del tiempo,


acarreando minutos y segundos.


Padece en la angustia del tiempo,


restregando minutos y segundos.


Duele en el ansia del tiempo,


agonizando minutos y segundos.


Participa en la armonía del tiempo,


azucarando minutos y segundos.


A contratiempo…


en el transcurso del tiempo…


la edad saborea minutos y segundos…


y huye despavorida


entre el siempre y el jamás.



martes, 12 de julio de 2011

SABIDURÍA POPULAR

Verano.
¿Calor?
Calor.
Cielo despejado, muy despejado, celeste cálido e intenso. Todas las nubes han caído al mar en forma de espuma.

Busco una sombra, una calle perpendicular a mis pensamientos, a mi sudor. La encuentro... por momentos... Mas vuelvo a la luz, al sol, a la vida, al sentido de la vida...
Calle La Rosa. Calle mágica y viva, como su nombre. Luce sus mejores galas hoy, hay ambiente festivo, de verano. Vendedores ambulantes, gente, mucha gente... bares, frutería, tiendas de todo a cien, o de los veinte duros (como les digo yo... ¡ay esas cien pesetas!... ¿dónde estarán?), vendedores de pescado en la esquina de la calle Torre... y gente, más gente... Y el vendedor de los cupones de la O.N.C.E.... atiende a una señora camino de La Caleta, en busca de un buen chapuzón, que ya es hora... Y escucho y me vuelvo para llenarme de sabiduría popular... "Ni la vejez ni la soledad son culpa mía".

Me pongo a cavilar. Es verdad que de la vejez no tengo culpa, aunque quiero pensar en la vejez corporal, que no la de mente y corazón. Pero bueno, ¿de la soledad es culpable uno? Quiero pensar que no, aunque es una suerte no estar solo, mucha suerte... ¿cuánta gente se encuentra sola sin nadie a quien decirle solamente... hola, buenos días. O un buenas noches cuando el día fenece. Por ello hoy me encuentro feliz, tengo gente a mi alrededor gente, bastante gente que me hace ser yo. Y eso me hace sentir bien. No estoy solo.

viernes, 8 de julio de 2011

jueves, 7 de julio de 2011

DESPEDIDA DE MI COLE



(ARTÍCULO PUBLICADO EL DÍA 8 DE JULIO DE 2011 EN EL PERIÓDICO TRAFALGAR)


GRACIAS PATERNA, GRACIAS EL LLANO


Gracias, Paterna, gracias El Llano.



Gracias, mil gracias.



Gracias por estas dos últimas semanas que han sido para mí entrañables, plena de homenajes por el profesorado del cole, por las familias y por el consistorio de Paterna.



Gracias por estos catorce años que he “vivido” en Paterna, en este hermoso pueblo, tan desconocido por muchos.



Llega el final de curso y me tengo que despedir. En un año “normal”, es una alegría empezar las “merecidas” vacaciones… pero este año, para mí no.



Sí, parecía que nunca iba a llegar este día, pero ya veis, llegó. Con muchísima pena, tengo que despedirme de nuestra escuela y de Paterna.



Han sido unos años maravillosos en este bonito y entrañable pueblo, que me acogió estupendamente desde el primer día, en septiembre hace ya catorce años. He sido director durante todos esos años, un auténtico orgullo y un placer.



Los inicios fueron muy difíciles, partimos de la nada, con unos pocos muebles antediluvianos, unas sillas y mesas viejas y unos cuantos juguetes desusados que trajimos desde casa, propios o recogidos de nuestros vecinos. Y estuvimos deambulando por diferentes, incómodas e inapropiadas ubicaciones del pueblo (el colegio Juan XXIII, compartido con el I.E.S., el antiguo ambulatorio, la antigua biblioteca) hasta encontrar nuestra “tierra prometida”, nuestra magnífica escuela… “un palacio”… ¡Hasta tuvimos que hacer el profesorado y Fernando, el conserje, la mudanza con un batea a lo largo de la Avenida de Blas Infante!



Los ojos se me llenan de lágrimas al recordar tantas y tantas cosas desde que un día, allá por el diez de abril del año 2000, al fin, abrimos las puertas a este magnífico centro, envidia de muchos. Meses antes, con la maestra Nati, que este año se nos jubila, pusimos la primera piedra. ¡Qué ilusionante!



Gracias al esfuerzo y a la colaboración de todos y cada uno de los maestros y maestras que han pasado por este maravilloso colegio (de quienes tanto he aprendido), y que han dejado su huella en él, día tras día, la escuela es lo que es. TODOS Y TODAS, poquito a poco, con mucha dedicación, con mucho trabajo, y a la vez, con muchísima ilusión, han puesto los cimientos sobre los que se sustenta nuestro centro. TODOS Y TODAS han ido sumando poco a poco experiencias, ideas… ilusiones.



Espero que toda la Comunidad Educativa acoja al nuevo Equipo Directivo con la misma ilusión con la que habéis trabajado durante todos estos años.



Asimismo, al profesorado actual, decirle que continúe trabajando por la calidad de la educación que se imparte en nuestra escuela, que merece la pena. Y a Fernando Barroso, de quien siempre digo que es más que un conserje, mi mano derecha, de quien también he recibido consejos y me ha servido para ir comprendiendo mejor a las personas de este pueblo. Le echaré mucho de menos. Y a Juan Luis, nuestro administrativo, a quien he vuelto loco en más de una ocasión con el papeleo.



Y al Ayuntamiento en general, que siempre, siempre me ha mostrado su apoyo y a toda la escuela durante estos años, con José María Barrera, el alcalde, a la cabeza. Y, principalmente, estos últimos cursos, a la Concejala de Educación, Lucía Torrejón, que se ha desvivido por nuestro centro. Un recuerdo especial para Manoli Corchado, que también se entregó como concejala cuando ejercía en el consistorio, a José Antonio Domínguez, a Fernando Bermúdez, Bernardi Chacón, Susana Domínguez, Didier, Andrés Barroso, Paqui…



Al nuevo equipo de gobierno, con Alfonso Caravaca a la cabeza, darle la enhorabuena y que continúe apoyando a la educación de nuestro pueblo y a nuestra escuela en particular. Y las gracias por la placa que me entregó en un emotivo acto el pasado 24 de junio.



Y despedirme de los otros centros que nos acompañan en la educación de nuestra localidad: El Colegio Perafán, con su gran director Jose; al igual que el IES, con su trabajador e incansable director Paco. Y al Centro de Adultos, con María, que lleva una lucha tremenda con la alfabetización de nuestra localidad. Y a los más pequeños, de la Escuela Infantil “Los Pasitos”, que han iniciado este curso su andadura con su ilusionante directora Yolanda y el equipo que la conforma. Y a todos aquéllos que por una u otra causa tienen relación con nuestra escuela, como colaboradores, proveedores…



Gracias a todos los padres y madres, que siempre han sabido encontrar su lugar en nuestro colegio, respetándolo, con su esfuerzo por hacerlo más hermoso, más lleno, y cada vez más grande, durante estos años. Sabed que NUESTRA ESCUELA, de verdad os lo digo, ocupa un lugar muy importante en la provincia y en Andalucía. Creedlo, creed en vosotros y vosotras, creed en vuestro centro (no olvidéis que es de todos y entre todos la hacemos) para que sigáis trabajando por él y por vuestros hijos e hijas, para que siga creciendo.



Gracias a todos los equipos directivos con los que he trabajado y me han apoyado y seguido, a pesar de mis exigencias (soy muy inquieto, ya lo sabéis) y a todos los maestros y maestras que han pasado por aquí y que, creedme, ocupan un lugar muy importante en mi corazón.



Gracias, mil gracias a todos y todas.



Gracias a mis amigos José Aurelio Martín, que hace de la vida un teatro, y a Benito Gallardo, que hace de la música, la vida. Seguid luchando por lo que creéis, ése debe ser nuestro estandarte, allá donde vayamos. Y mi agradecimiento a Fátima Reyes, porque siempre ha creído en lo que hacíamos y ha publicado nuestras experiencias, una tras otra en el periódico Trafalgar.



Ahora ya me toca volver a mi ciudad, Cádiz, a seguir intentando sembrar en la infancia. Ésta es una magnífica vocación-profesión que nos hace SENTIR (con mayúsculas), que nos hace VIBRAR y llenar de VIDA nuestros corazones. La educación me ha dado muchas satisfacciones y todavía, creo, me dará muchas más, pero las que me ha aportado en vuestra localidad ocupan un lugar destacado en mi vida, en mi corazón. Ha sido una experiencia maravillosamente enriquecedora, vital.



Gracias, mil gracias.



Un fuerte abrazo a todos y a todas… y un beso muy fuerte a mis niños y niñas de El Llano, de Paterna, a todos los que han pasado por la escuela durante estos catorce años a quienes siempre llevaré en mi corazón, con toda mi sinceridad.



¿Sabéis lo que siento cuando me saludan y me dan un beso por la calle (aún siendo ya mayores, con dieciocho o diecinueve años) los niños y niñas que han pasado por el cole? Son muchas generaciones, muchas. Y siempre serán MIS NIÑOS Y MIS NIÑAS.
Ya no lo digo más, mientras las lágrimas llenan mis últimos días en MI COLE POR Y PARA SIEMPRE, recordaros que os quedáis con un buen trozo de mi corazón, nunca os olvidaré, NUNCA OLVIDARÉ PATERNA Y EL LLANO. Y me tenéis siempre (os hablo con toda la sinceridad, bien lo sabéis) a vuestra disposición, allí, en mi Cádiz, en mi Caleta, “pegaíto al mar”, oliendo a sal, a sol y a luna, junto a las gaviotas y a los peces, para lo que necesitéis.



Hasta siempre, de todo corazón.



Un beso.









































































































































domingo, 3 de julio de 2011

TEATRO EN VEJER




LA ROSA Y EL SAPO

Había una vez una rosa muy bella, se sentía una maravilla al saber que era la rosa más bella del jardín.


Sin embargo un día se dio cuenta que la gente la miraba de lejos y observó que al lado de ella había un sapo negro, grande y gordo.


Al percatarse que por eso nadie se acercaba a ella le dijo muy molesta: -sapo por que no te alejás de mi, no ves que por tu culpa nadie se acerca a mi?, es que eres muy feo!!. El sapo le contesto: -esta bien si eso es lo que quieres me iré. Muy obediente el sapo se alejó brincando de la rosa.


Poco tiempo después el sapo se paseaba por el jardín cuando se dió cuenta que la rosa estaba toda marchita y con muy pocos pétalos en ella y le dijo: -hijo de rosa ahora si que te encuentras marchita que te pasó?.


La rosa le contestó: -es que desde que te fuiste las hormigaas me han comido día y noche, no volveré a ser la más bella del jardín. El sapo le dijo: -pues claro, cuando yo estaba aquí me comía a esas hormigas y por eso siempre eras la mas bella del jardín.


Muchas veces despreciamos a los demás por creer que somos más que ellos o que simplemente no nos sirven para nada. En este mundo nadie está sobrado, todos tenemos algo que aprender de los demás o algo que enseñar.


A veces hay personas que nos hacen un bien del cual ni siquiera estamos conscientes.