El pasado viernes 17 de junio participó el grupo Oliversando, al que pertenecemos Lola y yo, en un paseo botánico-poético, junto con el grupo GEA, en el que aprendimos y disfrutamos recitando en los rincones de la Alameda de Adolfo Suárez, de Jaén.
Aquí está el nuevo poema que hice para el evento y algunas fotos.
De barro
ensangrentado,
roja la
tierra de primavera,
surge
hipnotizadora tu silueta
naturaleza de
lluvia, suelo empapado.
Brota tu
realidad de colorida vidriera,
arráncame de
parte a parte
para vivir
sin la ira de mi tormenta.
Los surcos que
te han herido
son sueños
del pasado sin olvido,
que me
ahogan las distancias
y fronteras
que te cercan el corazón.
Que añoro del
verdor tu verdad
y dibujar en
mi lienzo estelar
el olor de
tu inocencia.
Escribir tu primitiva
historia
sobre el papel
de la ciencia,
quiero mis
labios rozar
tu ruboroso rojo
vital.
Quiero oír
la celestial sinfonía
que me
amamanta de energía.
ELLA:
(No, no me
mires,
No me
toques,
No me digas.
Ámame tal
como soy.
Escucha al
poeta,
que así es
la rosa.
Así soy,
así sea.
Amén.)
…
(las aves se
aclaran sus alas
para llenar
su canto
del alma del
olivar,
del olor
insufrible del olivar,
-
que
no cese su algarabía.
Mientras la tarde presiente
la rabia del olivo enjuto.
Las pisadas del sol,
cansado, vencido,
entristecen la agonía del día).
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